Dentro del contexto del ahorro energético, las ventanas han de ser cada vez mejores para ofrecer un mayor aislamiento térmico. La Norma Básica NBE-CT-79 sobre Condiciones Térmicas en los Edificios actualmente en vigor, recoge los requisitos que debe cumplir un cerramiento y con ello la ventana, que forma parte del mismo.

El grado de aislamiento térmico de una ventana viene dado por los siguientes factores:

• Tipo de material de que está fabricada la ventana.
• Paso de aire entre hoja y marco.
• Acristalamiento.
• Unión del vidrio a su bastidor.
• Montaje a obra.

En el caso de los sistemas VEKA, se trata de perfiles de cámaras múltiples con paredes exteriores de gran espesor y con sistema estanco de juntas de EPDM.

Dependiendo del tipo de vidrio escogido, el conjunto de la ventana pueda dar unos valores k entre 2,15 y 1,37 kcal/m² h ºC (entre 2,50 y 1,60 W/m² ºC).

El aislamiento acústico en una carpintería es cada día más importante y ello viene dado por el aumento de la calidad de vida y una mayor necesidad de confort en nuestra vivienda. Se ha de tener en cuenta para ello lo especificado en la Norma Básica NBE-CA-88 Condiciones Acústicas en los Edificios.

Para obtener un buen aislamiento acústico la carpintería debe cumplir una serie de requisitos, como son:

• Una correcta elaboración que evite que en cualquiera de sus soluciones se  produzcan puentes acústicos.
   
• Que en las hojas de la ventana se puedan colocar toda clase de vidrios especiales con los que aumentar las propiedades aislantes.
   
• Un correcto montaje a obra que impida vibraciones y/o paso de ruido.

La ventana de PVC VEKA equipada con vidrio aislante de 20 mm (4/12/4 mm) hace que el nivel de ruido ambiental disminuya en 32 dB, mientras que con una Ventana Acústica y los correspondientes vidrios podemos alcanzar los 48 dB de atenuación acústica.